Esta es la décima temporada de Bird en las Storm, cosa que se celebró el sábado en el Key Arena, regalando un nuevo “bobblehead” de Sue de edición especial a los primeros 4,000 asistentes.
"When I think about being with this franchise for 10 years, I really feel like I've grown up here," dice Bird. "From year 21 to now I'm 30, a lot happens in your 20s. Basketball-wise, the fans, the community, they've embraced me and they've watched me do that. It's something special."
La primera cosa que chocó a Sue sobre Seattle era la distancia a la que está de New York, donde ella vivía. Bird había podido estar relativamente cerca durante su etapa en la universidad de Connecticut. Después de ser elegida en el draft por Seattle en 2002, Bird tuvo que cruzar el país para ir a Seattle, donde solo había estado una vez con UCon en 2000.
"I just knew it was really far," confiesa Bird. "It was the first time I was going to be really far from my home and my friends and family. I wasn't nervous about that, but that's all I knew."
La temporada de Sue como rookie fue, como ella la describe, un torbellino. Era la nueva cara de la WNBA y estaba muy ocupada con viajes y entrevistas y apenas tenía tiempo para conocer algo de Seattle. Ella bromea sobre los 10 minutos que se tomaba para ir en coche a buscar algo de comer, en vez de ir a la tienda que había cerca del Key Arena o de dónde entrenaba.
"The minute the season was over, I was on a redeye," dice Bird. "We got knocked out of the playoffs - the next day I was on my way home."
Para su segunda temporada WNBA, Sue quiso conocer algo mejor la ciudad de Seattle.
"I remember prior to the 2003 season, in my head I made this deal with myself," dice Bird. "You're going to go out and enjoy things, you're going to explore. I knew I wasn't giving myself a fair chance to enjoy things, so I really made a concerted effort to do that and it opened up a whole new world. That next offseason, I bought a home."
Bird además ha conseguido con el tiempo que su relación con los fans de las Storm sea realmente especial. Ella habla de momentos en los que se ha sentido muy querida, como cuando los fans la votan para participar en los All-Stars o como cuando se rompió la nariz en los playoffs de 2004.
A parte de los dos campeonatos que ha conseguido, los momentos más memorables para Sue en Seattle tienen que ver con los fans. Después de perder una gran derrota ante las Comets en el partido 3 de los playoffs de 2005, los fans se reunieron cerca del Key Arena para animar y ovacionar al equipo.
"It speaks to our fans and their passion for the game of basketball, the WNBA and for us," dice Sue. "That's an odd highlight but it's something I'll always remember."
Pidiendo disculpas por no acordarse de todo, hay muchas cosas que Sue remarca. Grandes actuaciones de Lauren Jackson, como cuando consiguió 20 puntos y 20 rebotes ante las Charlote Sting en 2003 o momentos divertidos como Seimone Edwars pasando el balón a Doppler o Lauren anotando en aro equivocado.
Bird además habla en especial del juego crucial de 2002 contra las Portland Fire, partido que las Storm necesitaban ganar para entrar en playoffs. Apoyadas por 10,000 personas en el publico, Sue recuerda lo importante que fue la gente esa noche para conseguir la victoria. (Bird es demasiado modesta para recordar que anotó 33 puntos que fueron más que importantes en ese partido.)
Algun dia, cuando se haya retirado, Sue podrá mirar atrás y recordar que ha estado en momentos muy importantes en Seattle y que forma parte de la familia de las Storm.
"When there was talk of us moving to Oklahoma with the Sonics," dice ella, "that was one of the things that really made me the saddest - the thought of not finishing my career here, not retiring here, not being able to come back as a retired player and sit courtside at games. That was something that almost hit me harder than anything else. I want that to be the case."
Solo Sue Bird y Lauren Jackson han estado tanto tiempo en el equipo de las Storm tanto tiempo. Incluso en la WNBA, que es fácil mantener a una estrella en su equipo, solo hay tres jugadoras que han estado al menos 10 años en un mismo equipo: Bird, Jackson y Tamika Catchings para Indiana Fever. Este hecho sorprendió a Sue Bird.
"I didn't realize how rare it was, I guess," bromea. "Either we're really good and they didn't want to give us up or we're really loyal and we didn't want to leave."
Más info: Una década con las Seattle Storm
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